11. Jesús, al que le dicen el Justo también los saluda. Estos son los únicos judíos cristianos que trabajan conmigo por el reino de Dios y ¡de cuánto consuelo me han sido!
12. Epafras, que es paisano de ustedes y siervo de Jesucristo, los saluda. Siempre ora fervientemente por ustedes para que Dios los ayude a mantenerse firmes, ser maduros y continuar dedicados a cumplir la voluntad de Dios.
13. Les aseguro que de veras ha orado intensamente por ustedes, así como por los cristianos de Hierápolis y Laodicea.
14. Lucas, el médico amado, los saluda también, y lo mismo hace Demas.
15. Saluden a los hermanos de Laodicea, a Ninfas y a los que se reúnen en su casa.
16. Después que lean esta carta, tengan la bondad de hacerla llegar a la iglesia de Laodicea. Y lean también ustedes la carta que les estoy mandando a ellos.
17. Díganle a Arquipo que no deje de hacer lo que el Señor le encargó.
18. Y aquí va un saludo de mi puño y letra: Recuerden que estoy preso. Que Dios los llene de su amor.