2 Samuel 7:18-27 Nueva Biblia al Día (NBD)

18. Entonces David entró a la carpa donde estaba el cofre y se sentó delante del SEÑOR, y le dijo: «Mi SEÑOR y Dios, ¿por qué me has engrandecido, si yo y mi familia somos tan insignificantes?

19. Y ahora, además de todo, hablas de darme una dinastía eterna. Tu generosidad es superior a lo que de un hombre se pudiera esperar. Mi SEÑOR y Dios

20. ¿qué más puedo decir? Porque tú sabes cómo soy.

21. Tú haces todas estas cosas porque tú lo has prometido y lo has querido.

22. »¡Cuán grande eres, mi SEÑOR y Dios! ¡Nunca hemos oído de un Dios como tú! ¡Es que no existe otro dios!

23. ¿Qué otras naciones en la tierra han recibido bendiciones similares a las de Israel tu pueblo? Porque tú rescataste de la esclavitud a tu nación escogida, para traer gloria a tu nombre. Tú la rescataste para ti de Egipto, de las otras naciones y de sus dioses.

24. Tú escogiste a Israel para que sea tu pueblo para siempre, y tú has sido nuestro Dios.

25. »Y ahora, mi SEÑOR y Dios, haz lo que has prometido tocante a mí y a mi familia.

26. Que seas eternamente honrado por haber establecido a Israel como tu pueblo, y haber afirmado mi dinastía delante de ti.

27. »Porque tú, SEÑOR todopoderoso, Dios de Israel, me has revelado que yo soy el primero de una dinastía que gobernará a tu pueblo para siempre. Por eso es que me he atrevido a elevarte esta oración.

2 Samuel 7