10. Esto es lo que les espera a los que siguen siempre sus pensamientos corrompidos, que desprecian la autoridad del Señor y son tan orgullosos y testarudos que no tienen miedo de insultar a los poderes del mundo invisible.
11. Ni siquiera los ángeles, que son mayores en fuerza y potencia, se atreven a hablar de ellos irrespetuosamente delante del Señor.
12. Pero estos falsos maestros, como animales irracionales que nacen para ser apresados y matados, se guían únicamente por sus instintos. En su insensatez, se burlan de asuntos de los que saben muy poco. Pero un día, como esos animales, también perecerán en su corrupción
13. y recibirán lo que se merecen por vivir injustamente. Ellos viven entregados sin freno alguno a las pasiones en pleno día. Ciertamente, son una vergüenza y un escándalo cuando participan con ustedes en sus fiestas, gozándose en sus placeres.
14. No hay mujer que se escape de sus lujuriosas miradas y no se cansan de cometer adulterio. Seducen a las personas débiles; son maestros en la avaricia y gente maldita.
15. Andan tan descarriados que son como seguidores de Balán, el hijo de Bosor, quien por ganar dinero hacía cualquier cosa injusta y
16. tuvo que ser reprendido por su iniquidad: su burra le habló con voz humana y refrenó su locura.
17. Estos individuos son como manantiales secos; son inestables como nubes de vendaval. ¡Están condenados a vivir en la más negra oscuridad!