10. Así que, amados hermanos, puesto que Dios los ha llamado y escogido, procuren que esto eche raíces en ustedes, pues así nunca tropezarán ni caerán.
11. Además, les será concedida amplia entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
12. Jamás dejaré de recordarles estas cosas, aun cuando las sepan y permanezcan firmes en la verdad.