2 Crónicas 1:10-17 Nueva Biblia al Día (NBD)

10. Te suplico que me des sabiduría e inteligencia para gobernar correctamente, porque ¿quién sería capaz de gobernar por sí mismo a una nación tan grande como este pueblo tuyo?

11. Dios le respondió:—Por cuanto tu más grande anhelo es ayudar a tu pueblo, y no has pedido riqueza personal ni honores, ni me has pedido que maldiga a tus enemigos, ni has solicitado una larga vida, sino que has pedido sabiduría y conocimiento para guiar a mi pueblo en forma adecuada,

12. ¡te doy la sabiduría y el conocimiento que has pedido! ¡Y también te daré riquezas, bienes y honores como ningún rey antes de ti los ha tenido! ¡Jamás habrá otro rey tan grande en todo el mundo!

13. Salomón, entonces, salió del santuario que estaba en Gabaón, bajó del cerro, y regresó a Jerusalén para gobernar a Israel.

14. Salomón acrecentó el número de sus caballos y de sus carros de combate. Fue así como llegó a tener mil cuatrocientos carros y reclutó doce mil jinetes, los cuales mantenía en los lugares de acuartelamiento y en Jerusalén, cerca de él.

15. ¡Durante el reinado de Salomón, la plata y el oro eran tan abundantes en Jerusalén como las piedras en los caminos! ¡Y la costosa madera de cedro se utilizaba como cualquier sicómoro común!

16. Los comerciantes de la corte compraban en Egipto y Cilicia los caballos para el rey Salomón.

17. En esa época, un carro de combate traído de Egipto costaba seiscientas monedas de plata, y un caballo costaba ciento cincuenta monedas de plata. Muchos eran luego vendidos a los reyes de los hititas y de los sirios.

2 Crónicas 1