2-3. desde ese día ya no lo dejó volver a su casa. David conoció a Jonatán, hijo del rey, e inmediatamente se estableció entre ellos un fuerte lazo de amistad. Jonatán lo amó como a un hermano, e hizo un pacto con él,
13. Finalmente, Saúl lo echó de su presencia y le redujo la responsabilidad sobre el ejército. Pero la controversia hizo que David fuera aun más conocido por la gente.
14. David siguió teniendo éxito en todo lo que emprendía, porque el SEÑOR estaba con él.
15. Cuando el rey Saúl se dio cuenta de esto, su temor creció aún más;
16. pero todo Israel y Judá amaban a David, porque era el que encabezaba las tropas cuando salían de campaña.
17. Un día Saúl le dijo a David:—Te voy a dar a Merab, mi hija mayor, como esposa. Pero primero tendrás que probar que eres un verdadero soldado que pelea las batallas del SEÑOR.Porque Saúl pensó: «Lo enviaré contra los filisteos y ellos lo matarán y así no tendré que hacerlo yo».
18. —¿Quién soy yo para ser yerno del rey? —exclamó David—. La familia de mi padre es humilde.
19. Pero cuando llegó el tiempo de la boda, Saúl la casó con Adriel, un hombre de Meholat.
20. Mientras tanto Mical, la hija de Saúl, se había enamorado de David, y Saúl se alegró cuando lo supo.
21. «Ésta es otra oportunidad para tenderle una trampa y hacer que lo maten los filisteos», se dijo Saúl. Pero a David le dijo:—Serás mi yerno al fin, pues hoy te daré a mi hija menor.
22. Luego dio órdenes a sus hombres para que le dijeran confidencialmente a David que el rey lo estimaba mucho, y que todos lo querían y pensaban que debería de aceptar la proposición del rey de ser su yerno.
23. Pero David contestó:—¿Cómo puede un hombre como yo, de familia humilde, obtener una dote para casarse con la hija de un rey?
24. Cuando los hombres de Saúl le informaron esto,