1. Entonces Samuel tomó una redoma de aceite de oliva y lo derramó sobre la cabeza de Saúl, lo besó en la mejilla y le dijo:—Hago esto porque el SEÑOR te ha señalado para que seas el rey de su pueblo, de Israel.
2. Cuando te hayas ido de aquí, verás a dos hombres junto a la tumba de Raquel en Selsa, en la tierra de Benjamín. Ellos te dirán que ya aparecieron las burras y que tu padre está preocupado por ti y no cesa de preguntar: “¿Cómo podré encontrar a mi hijo?”
3. »De allí ve a la encina de Tabor, donde verás a tres hombres que vienen hacia ti y que van a adorar a Dios en el altar de Betel. Uno de ellos llevará tres cabritos, otro llevará tres panes, y el tercero un odre de vino.
4. Hablarán contigo y te ofrecerán los dos panes, y tú los aceptarás.
5. »Después de eso llevarás a Guibeá Elohim (Monte de Dios), donde está la guarnición de los filisteos. Allí encontrarás a un grupo de profetas que descienden de la colina tocando el salterio, el pandero, la flauta y el arpa, y que profetizan mientras caminan.
6. En ese momento el Espíritu del SEÑOR descenderá repentinamente sobre ti y tú profetizarás con ellos y sentirás y actuarás como una persona diferente.
7. Desde ese momento tendrás que tomar decisiones basadas en lo que te parezca mejor según las circunstancias, porque el SEÑOR estará contigo.
8. »Ve a Gilgal y espérame allí siete días, porque yo descenderé a presentar holocaustos y ofrendas de paz. Yo te daré nuevas instrucciones cuando llegue.
9. Cuando Saúl se despidió y emprendió el camino, Dios le cambió la vida, y todas las profecías de Samuel se cumplieron aquel día.
10. Al llegar Saúl y su criado al monte de Dios, vieron a los profetas que descendían hacia ellos y el Espíritu de Dios descendió sobre Saúl y él también comenzó a profetizar.
11. Cuando sus amigos lo supieron, dijeron:—¡Cómo! ¿Saúl entre los profetas?
12. Y uno de los vecinos agregó:—¿Con un padre como éste?Así se originó el proverbio: «¿Saúl también entre los profetas?»
13. Cuando Saúl acabó de profetizar, subió a la colina ante el altar.
14. —¿Dónde estuvieron? —le preguntó un tío.Y Saúl respondió:—Fuimos a buscar las burras y no pudimos encontrarlas. Entonces fuimos a preguntarle al profeta Samuel dónde estaban.
15. —¿Y qué dijo? —le preguntó su tío.
16. —Dijo que las burras ya habían sido halladas —contestó Saúl, pero no le contó que había sido ungido rey.
17. Samuel convocó a todo Israel en Mizpa