20. cuando iban errantes de país en país, de un reino a otro,
21. Dios no permitió a nadie que les hiciera daño.Por amor a su pueblo, les advertía a los reyes:
22. “No hagan daño a mi pueblo escogido;no traten mal a mis profetas”.
23. »¡Que toda la tierra cante al SEÑOR!¡Declaren todos los días que el SEÑOR es quien salva!