6. De aquí aprendemos una gran lección: que no debemos desear lo malo como ellos lo desearon.
7. No debemos adorar ídolos, como ellos. (Las Escrituras nos dicen que «el pueblo se sentó a comer y a beber, y luego se produjo el desenfreno.»)
8. No debemos cometer inmoralidades sexuales, como varios de ellos hicieron, por lo que veintitrés mil cayeron muertos en un día.
9. No pongamos a prueba al Señor, porque muchos de ellos lo hicieron y murieron mordidos por serpientes.
10. Y no murmuremos contra Dios, como hicieron algunos israelitas y el Señor envió a su ángel a destruirlos.
11. Estos incidentes ocurrieron para servirnos de ejemplo; son una advertencia y fueron escritos para nosotros que vivimos cuando el mundo se aproxima a su fin.