Lucas 23:26-32 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

26. Cuando lo llevaban para crucificarlo, echaron mano de un tal Simón, natural de Cirene, que volvía del campo, y lo cargaron con la cruz para que la llevara detrás de Jesús.

27. Lo acompañaba mucha gente del pueblo junto con numerosas mujeres que lloraban y se lamentaban por él.

28. Jesús se volvió hacia ellas y les dijo:—Mujeres de Jerusalén, no lloren por mí; lloren, más bien, por ustedes mismas y por sus hijos.

29. Porque vienen días en que se dirá: «¡Felices las estériles, los vientres que no concibieron y los pechos que no amamantaron!».

30. La gente comenzará entonces a decir a las montañas: «¡Caigan sobre nosotros!»; y a las colinas: «¡Sepúltennos!».

31. Porque si al árbol verde le hacen esto, ¿qué no le harán al seco?

32. Llevaban también a dos criminales para ejecutarlos al mismo tiempo que a Jesús.

Lucas 23