3. todos los animales rumiantes que tengan la pezuña partida;
4. por tanto, aunque sean rumiantes o tengan la pezuña partida, no comerán: el camello al que considerarán impuro porque es rumiante, pero no tiene pezuña partida;
5. el conejo al que considerarán impuro porque es rumiante, pero no tiene la pezuña partida;
6. la liebre a la que considerarán impura porque es rumiante, pero no tiene la pezuña partida;
7. el cerdo al que considerarán impuro porque tiene la pezuña partida, pero no es rumiante.
8. No comerán de la carne de estos animales, ni tocarán sus cadáveres; los considerarán impuros.