1. Iba Jesús de camino cuando vio a un hombre ciego de nacimiento.
2. Sus discípulos le preguntaron:—Maestro*, ¿quién tiene la culpa de que haya nacido ciego este hombre? ¿Sus pecados o los de sus padres?
3. Jesús respondió:—Ni sus propios pecados ni los de sus padres tienen la culpa; nació así para que el poder de Dios resplandezca en él.
4. Mientras es de día debemos realizar lo que nos ha encomendado el que me envió; cuando llega la noche, nadie puede trabajar.