14. que dice esto: «No se dejen engañar por Ezequías, pues no podrá librarlos de mi mano.
15. Que Ezequías no los haga confiar en el Señor, diciendo: “Estoy convencido de que el Señor nos salvará y no entregará esta ciudad en poder del rey de Asiria”.
16. No hagan caso a Ezequías, pues esto dice el rey de Asiria: “Hagan la paz conmigo y ríndanse a mí; de esta manera cada cual podrá seguir comiendo los frutos de su parra y de su higuera; y podrá seguir bebiendo agua de su pozo,
17. hasta que yo vaya en persona y los lleve a una tierra como la de ustedes, una tierra de grano y de mosto, una tierra de mieses y viñas”.
18. Que no los engañe Ezequías diciendo que el Señor los librará. ¿Acaso los dioses de otras naciones las han podido librar del poder del rey de Asiria?