7. Incluso han llegado a cerrar las puertas del atrio, apagando las lámparas y dejando de quemar incienso y de ofrecer holocaustos en el santuario al Dios de Israel.
8. Por eso el Señor se ha enfurecido contra Judá y Jerusalén y las ha convertido en objeto de espanto, estupefacción y burla, como están viendo con sus propios ojos.
9. Por eso nuestros mayores murieron a espada, y nuestros hijos, hijas y mujeres fueron deportados.
10. Ahora quiero sellar una alianza con el Señor, Dios de Israel, para que aparte de nosotros su cólera.