11. Suyo es el poder para siempre. Amén.
12. Por medio de Silvano, a quien considero hermano de la total confianza de ustedes, les he escrito brevemente para animarlos y asegurarles que esta es la verdadera gracia de Dios. ¡Manténganse en ella!
13. Los saluda la iglesia de Babilonia, a la que Dios ha elegido, lo mismo que a ustedes. También los saluda mi hijo Marcos.
14. Salúdense mutuamente con un beso de amor fraternal. Paz a todos ustedes que viven unidos a Cristo.