19. Otro dijo: «Acabo de comprar cinco yuntas de bueyes y tengo que ir a probarlas. Discúlpame, por favor».
20. El siguiente dijo: «No puedo ir, porque acabo de casarme».
21. El criado volvió a casa y refirió a su señor lo que había ocurrido. Entonces el dueño de la casa, muy enojado, ordenó a su criado: «Sal en seguida por las plazas y las calles de la ciudad y trae aquí a los pobres, los inválidos, los ciegos y los cojos».
22. El criado volvió y le dijo: «Señor, he hecho lo que me ordenaste y aún quedan lugares vacíos».