Hechos 9:8-14 La Palabra Versión Española (BLP)

8. Saulo se levantó del suelo y, cuando abrió los ojos, no podía ver. Así que lo llevaron de la mano a Damasco,

9. donde pasó tres días privado de la vista, sin comer y sin beber.

10. Residía en Damasco un discípulo llamado Ananías. En una visión oyó que el Señor lo llamaba:— ¡Ananías!— Aquí estoy, Señor —respondió—.

11. El Señor le dijo:— Vete rápidamente a casa de Judas, en la calle Recta, y pregunta por un tal Saulo de Tarso. Ahora está orando

12. y acaba de tener una visión en la que un hombre llamado Ananías entra en su casa y le toca los ojos con las manos para que recobre la vista.

13. —Señor —contestó Ananías—, muchas personas me han hablado acerca de ese hombre y del daño que ha causado a tus fieles en Jerusalén.

14. Y aquí mismo tiene plenos poderes de los jefes de los sacerdotes para prender a todos los que te invocan.

Hechos 9