3. Entonces, después de haber ayunado y haber hecho oración, les impusieron las manos y los despidieron.
4. Investidos de esta misión por el Espíritu Santo, Bernabé y Saulo llegaron a Seleucia, donde se embarcaron rumbo a Chipre.
5. A su llegada a Salamina* comenzaron a proclamar el mensaje de Dios en las sinagogas judías. Como colaborador llevaban a Juan.