1. Para el director del coro; sobre ajelet Hasahar. Salmo de David. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación y de las palabras de mi clamor?
2. Dios mío, de día clamo y no respondes; Y de noche, pero no hay para mí reposo.
3. Sin embargo, Tú eres santo, Que habitas entre las alabanzas de Israel.