Mateo 8:10-20 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

10. Al oírlo Jesús, se maravilló y dijo a los que Lo seguían: "En verdad les digo que en Israel no he hallado en nadie una fe tan grande.

11. "Y les digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos.

12. "Pero los hijos del reino serán arrojados a las tinieblas de afuera; allí será el llanto y el crujir de dientes."

13. Entonces Jesús dijo al centurión: "Vete; así como has creído, te sea hecho." Y el criado fue sanado en esa misma hora.

14. Cuando Jesús llegó a casa de Pedro, vio a la suegra de éste que estaba en cama con fiebre.

15. Le tocó la mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó y Le servía.

16. Y al atardecer, Le trajeron muchos endemoniados; y expulsó a los espíritus con Su palabra, y sanó a todos los que estaban enfermos,

17. para que se cumpliera lo que fue dicho por medio del profeta Isaías cuando dijo: "EL TOMO NUESTRAS FLAQUEZAS Y LLEVO NUESTRAS ENFERMEDADES."

18. Viendo Jesús una multitud a Su alrededor, dio orden de pasar al otro lado del mar.

19. Y un escriba se acercó y Le dijo: "Maestro, Te seguiré adondequiera que vayas."

20. Jesús le respondió: "Las zorras tienen madrigueras (cuevas) y las aves del cielo nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza."

Mateo 8