Marcos 1:21-37 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

21. Entraron en Capernaúm; y enseguida, en el día de reposo, Jesús entró en la sinagoga y comenzó a enseñar.

22. Y se admiraban de Su enseñanza; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.

23. En ese momento estaba en la sinagoga de ellos un hombre con un espíritu inmundo, el cual comenzó a gritar:

24. "¿Qué tienes que ver con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quien Tú eres: el Santo de Dios."

25. Jesús lo reprendió, diciendo: "¡Cállate, y sal de él!"

26. Entonces el espíritu inmundo, causándole convulsiones al hombre, gritó a gran voz y salió de él.

27. Y todos se asombraron de tal manera que discutían entre sí, diciendo: "¿Qué es esto? ¡Una enseñanza nueva con autoridad! El manda aun a los espíritus inmundos y Le obedecen."

28. Enseguida Su fama se extendió por todas partes, por toda la región alrededor de Galilea.

29. Inmediatamente después de haber salido de la sinagoga, fueron a casa de Simón y Andrés, con Jacobo (Santiago) y Juan.

30. La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, y enseguida hablaron a Jesús de ella.

31. El se le acercó, y tomándola de la mano la levantó, y la fiebre la dejó; y ella les servía.

32. A la caída de la tarde, después de la puesta del sol, trajeron a Jesús todos los que estaban enfermos y los endemoniados.

33. Toda la ciudad se había amontonado a la puerta.

34. Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y expulsó muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque ellos sabían quién era El.

35. Levantándose muy de mañana, cuando todavía estaba oscuro, Jesús salió y fue a un lugar solitario, y allí oraba.

36. Simón y sus compañeros salieron a buscar a Jesús.

37. Lo encontraron y Le dijeron: "Todos Te buscan."

Marcos 1