Hechos 8:4-11 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

4. Así que los que habían sido esparcidos iban predicando (anunciando las buenas nuevas de) la palabra.

5. Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo (el Mesías).

6. Y las multitudes unánimes prestaban atención a lo que Felipe decía, al oír y ver las señales (los milagros) que hacía.

7. Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, éstos salían de ellos gritando a gran voz; y muchos que habían sido paralíticos y cojos eran sanados.

8. Y había gran regocijo en aquella ciudad.

9. Hacía tiempo que cierto hombre llamado Simón, estaba ejerciendo la magia en la ciudad y asombrando a la gente de Samaria, pretendiendo ser un gran personaje ;

10. y todos, desde el menor hasta el mayor, le prestaban atención, y decían: "Este es el que se llama el Gran Poder de Dios."

11. Le prestaban atención porque por mucho tiempo los había asombrado con sus artes mágicas.

Hechos 8