1 Corintios 11:26-34 La Nueva Biblia de los Hispanos (NBLH)

26. Porque todas las veces que coman este pan y beban esta copa, proclaman la muerte del Señor hasta que El venga.

27. De manera que el que coma el pan o beba la copa del Señor indignamente, será culpable del cuerpo y de la sangre del Señor.

28. Por tanto, examínese cada uno a sí mismo, y entonces coma del pan y beba de la copa.

29. Porque el que come y bebe sin discernir correctamente el cuerpo del Señor, come y bebe juicio para sí.

30. Por esta razón hay muchos débiles y enfermos entre ustedes, y muchos duermen (han muerto).

31. Pero si nos juzgáramos a nosotros mismos, no seríamos juzgados.

32. Pero cuando somos juzgados, el Señor nos disciplina para que no seamos condenados con el mundo.

33. Así que, hermanos míos, cuando se reúnan para comer, espérense unos a otros.

34. Si alguien tiene hambre, coma en su casa, para que no se reúnan para juicio. Los demás asuntos los arreglaré cuando vaya.

1 Corintios 11