1. Había un hombre rico e importante que vivía en Belén. Su nombre era Booz. Como era pariente de Elimélec, era uno de los que tenían que cuidar de Noemí.
2. Un día, Rut, la moabita, le dijo a Noemí: —Voy a buscar a alguien que sea bueno conmigo y me deje recoger las espigas de cebada que los trabajadores dejan en el campo. Entonces Noemí le respondió: —Sí, ve y hazlo, hija mía.
3. Así que Rut salió de inmediato y empezó a recoger espigas detrás de los trabajadores, y resultó que justamente ese campo pertenecía a Booz, el familiar de Elimélec.
4. Al rato Booz llegó de Belén y saludó a los trabajadores, diciendo: —¡Que el SEÑOR esté con ustedes! Y ellos respondieron: —¡Que el SEÑOR lo bendiga!
5. Luego Booz le preguntó al encargado de los trabajadores: —¿De qué familia es esta muchacha?