Números 23:5-23 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

5. Entonces el SEÑOR le dijo a Balán lo que debía decir y luego le ordenó: —Vuelve a donde está Balac y dile lo que yo te acabo de decir.

6. Balán volvió donde estaba Balac, quien se encontraba de pie, al lado de su sacrificio que debe quemarse completamente, junto a los jefes de Moab.

7. Entonces Balán dijo esta profecía: «Balac me trajo aquí desde Aram. El rey de Moab me hizo venir desde las montañas de oriente. Ven, me dijo, maldice por mí a Jacob, ven, deséale el mal a Israel.

8. Pero, ¿cómo voy a maldecir al que Dios no maldice? ¿Cómo desearle mal al que el SEÑOR no lo hace?

9. Puedo verlos desde la cima de las montañas y desde las colinas los observo. Es un pueblo que vive apartado y no se considera una nación entre las naciones.

10. ¿Quién puede contar a la descendencia de Jacob? Son tan numerosos como los granos de polvo. ¿O, quién puede contar al menos la cuarta parte de Israel? ¡Déjame morir como muere la gente buena, y déjame terminar como ellos!»

11. Balac le dijo a Balán: —¿Qué es esto que me has hecho? Te he traído para que maldigas a mis enemigos, pero no has hecho más que bendecirlos.

12. Pero Balán le contestó: —¿No te das cuenta que tengo que decir sólo lo que el SEÑOR me diga?

13. Balac le dijo a Balán: —Ven conmigo a otro sitio desde donde puedas verlos, aunque no verás todo el campamento sino sólo una parte, y maldícemelos desde ahí.

14. Entonces Balac lo llevó al campo de Zofín, en la cima del monte Pisgá. Balac construyó siete altares y ofreció un ternero y un carnero en cada altar.

15. Balán le dijo a Balac: —Quédate aquí junto a tu sacrificio que debe quemarse completamente mientras voy a reunirme con Dios.

16. El SEÑOR fue a encontrarse con Balán y le dijo lo que tenía que decir. Después le ordenó: —Vuelve a donde está Balac y dile eso.

17. Entonces Balán volvió a donde estaba Balac y lo encontró de pie al lado del sacrificio que debe quemarse completamente, junto con los jefes de Moab. Balac le preguntó: —¿Qué dijo el SEÑOR?

18. Entonces Balán dijo esta profecía: «Párate Balac y escucha, escúchame hijo de Zipor.

19. Dios no es un ser humano para que mienta o cambie de opinión. ¿Acaso él no hace lo que dice, o no cumple lo que promete?

20. Mira, mis órdenes son de bendecir. Dios ha bendecido a Israel, y eso yo no lo puedo cambiar.

21. Para los descendientes de Jacob no se contempla calamidad alguna; ni tampoco se espera ninguna desgracia para Israel. Pues el SEÑOR su Dios está con ellos; ellos lo proclaman su Rey.

22. Dios, que los sacó de Egipto, es para ellos su fortaleza, como los cuernos para el toro salvaje.

23. Contra Jacob no sirven los maleficios, ni hay brujería que valga contra Israel. De Jacob y de Israel se dirá como se dice ahora: “Mira lo que Dios ha hecho”.

Números 23