7. Los videntes estarán avergonzados; los que leen el futuro quedarán en ridículo. Todos ellos se quedarán callados porque Dios no les responderá.
8. En cambio, yo estoy lleno de fortaleza; estoy lleno del espíritu del SEÑOR y lleno de justicia y poder. Por eso puedo decirle a Jacob cuál es su rebelión, y a Israel cuáles son sus pecados.
9. Escuchen esto, líderes de Jacob y jueces de Israel: Ustedes detestan la justicia y dañan todo lo recto.
10. Ustedes construyen a Sion sobre la sangre de gente inocente; construyen a Jerusalén con injusticia.
11. Los jueces de Jerusalén se dejan sobornar, sus sacerdotes enseñan por una paga y sus profetas adivinan el futuro por dinero. Y aun así se acercan al SEÑOR y dicen: «¿Acaso el SEÑOR no está entre nosotros? Nada malo nos sucederá».
12. Debido a eso, por culpa de ustedes, Sion se convertirá en un campo arado y Jerusalén se convertirá en un montón de ruinas. El monte del templo se convertirá en una colina llena de arbustos.