Mateo 21:13-29 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

13. Jesús les dijo: —Está escrito: “Mi casa será llamada casa de oración”. ¡Pero ustedes la están convirtiendo en una “guarida de ladrones”!

14. Unos ciegos y cojos se acercaron a Jesús en el área del templo y él los sanó.

15. Pero cuando los jefes de los sacerdotes y los maestros de la ley vieron las maravillas que él había hecho y a los niños gritando en el área del templo: «¡Viva el Salvador, el Hijo de David!», se enojaron.

16. Le preguntaron a Jesús: —¿Oyes lo que estos niños están diciendo? Jesús les contestó: —Sí, los oigo. ¿No han leído la Escritura sobre esto? “Tú lo has hecho para que hasta los niños y los bebés canten alabanzas”.

17. Entonces él los dejó y salió de la ciudad para Betania donde pasó la noche.

18. Muy de mañana, Jesús estaba de regreso en Jerusalén y sintió hambre.

19. Vio una higuera, pero sólo tenía hojas, se acercó y le dijo: —¡Que nunca más vuelvas a dar fruto! La higuera se secó al instante y murió.

20. Cuando sus seguidores vieron esto, se sorprendieron y dijeron: —¿Cómo se secó la higuera y murió tan rápido?

21. Jesús les respondió: —Les digo la verdad: si ustedes tienen fe y no dudan, no solamente serán capaces de hacer lo que yo hice con la higuera. Es más, podrán decirle a esta montaña: “Levántate y lánzate al mar” y así sucederá.

22. Si ustedes creen, recibirán todo lo que pidan en oración.

23. Cuando Jesús entró al área del templo, los jefes de los sacerdotes y los ancianos líderes del pueblo se le acercaron mientras estaba enseñando, y le preguntaron: —¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te la dio?

24. Jesús les contestó: —Yo también les haré una pregunta y si me la responden les diré con qué autoridad hago estas cosas:

25. ¿De dónde venía el bautismo de Juan? ¿De Dios o de los hombres? Ellos comenzaron a discutir entre sí y decían: «Si decimos que venía de Dios, él nos preguntará: “¿Por qué entonces no le creyeron?”

26. Pero no podemos decir que venía de los hombres. Tenemos miedo de la gente porque todos creen que Juan era un profeta».

27. Entonces le respondieron a Jesús: —No sabemos. Él les dijo: —Pues yo tampoco les voy a decir con qué autoridad hago estas cosas.

28. Jesús continuó: —¿Qué piensan de esto? Un hombre tenía dos hijos. Le dijo al mayor: “Hijo, ve hoy y trabaja en el viñedo”.

29. Él le contestó: “No quiero ir”. Pero más tarde cambió de idea y fue.

Mateo 21