1. Llegó el día en que los ángeles vinieron a presentarse nuevamente ante el SEÑOR. Satanás vino entre ellos a presentarse ante el SEÑOR.
2. El SEÑOR le dijo a Satanás: —¿Dónde has estado? Satanás le respondió: —He estado vagando por la tierra.
3. Entonces el SEÑOR le dijo a Satanás: —¿Te has fijado en mi siervo Job? No hay nadie como él en la tierra. Job es un hombre intachable, honesto, respeta a Dios y rechaza el mal. Se mantiene intachable, a pesar de que tú trataste de convencerme de que lo destruyera sin ningún motivo.
4. Satanás respondió al SEÑOR: —¡Entre la bolsa o la vida, mejor dar la bolsa! Verdaderamente un hombre daría todo lo que tiene con tal de salvar su vida.
5. Pero si tú usaras tu poder para lastimar su cuerpo, seguro que te maldeciría en tu propia cara.
6. Entonces el SEÑOR le dijo a Satanás: —Haz lo que quieras con Job, menos matarlo.
7. Satanás se retiró de la presencia del SEÑOR y afligió a Job con llagas dolorosas que lo cubrían de pies a cabeza.
8. Job agarró un pedazo de teja para rascarse y se sentó en medio de un montón de ceniza.
9. Su esposa lo vio y le dijo: —¿Todavía sigues queriendo ser intachable? ¡Maldice a Dios y muérete de una vez!
10. Pero Job le respondió a su esposa: —Estás hablando como una tonta. ¿Vamos a recibir de Dios lo bueno, pero no lo malo? En todo esto Job no cometió ningún pecado en lo que dijo.