1. Ese día el SEÑOR castigará con su espada poderosa, terrible y grande, a Leviatán, la serpiente huidiza y sinuosa, y matará al monstruo que está en el mar.
2. «Canten ese día al viñedo delicioso.
3. Yo, el SEÑOR, soy quien cuida de él. Lo riego continuamente y lo vigilo día y noche, para que nadie le haga daño.