45. Vendían lo que tenían y repartían el dinero entre los que estaban necesitados.
46. Los creyentes, compartían el mismo propósito, cada día solían dedicar mucho tiempo en el área del templo y comían juntos en las casas. Compartían la comida con sencillez y alegría,
47. alababan a Dios y todo el pueblo los estimaba mucho. Cada día el Señor añadía a la iglesia los que iban siendo salvos.