Gálatas 3:3-16 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

3. Comenzaron su nueva vida con el Espíritu, ¿y ahora intentan perfeccionarla por medio de un pedazo de piel? ¡Qué tontería!

4. Han pasado por muchas experiencias, ¿será que las van a desperdiciar? Quiero creer que no.

5. ¿Acaso Dios les da el Espíritu por cumplir la ley? ¿Acaso Dios hace milagros entre ustedes porque cumplen la ley? Dios les da el Espíritu y hace milagros porque escucharon la buena noticia de salvación y creyeron en ella.

6. Así «Abraham creyó a Dios, quien tomó en cuenta la fe de Abraham y lo aprobó».

7. Entonces tienen que saber que los verdaderos hijos de Abraham son los que tienen fe.

8. La Escritura preveía lo que pasaría en el futuro: debido a la fe de los que no son judíos, Dios los aprobaría y le dio a Abraham esta buena noticia: «Todas las naciones serán bendecidas por medio de ti».

9. Esto significa que todos los que tienen fe compartirán la misma bendición que recibió Abraham por haber creído.

10. Los que se preocupan sólo por cumplir la ley están bajo maldición, porque está escrito: «Uno debe hacer todo lo que dice la ley y si no obedece siempre la ley, estará bajo maldición».

11. Entonces es claro que nadie logra ser aprobado por Dios a través de la ley, porque «el aprobado por Dios, por la fe vivirá».

12. La ley no se basa en la fe. Por el contrario, «la persona que practica la ley obtiene vida gracias al mandamiento».

13. Cristo pagó para librarnos de la maldición de la ley y aceptó estar bajo maldición en lugar de nosotros. La Escritura dice: «Maldito todo aquel cuyo cuerpo es colgado en un madero».

14. Cristo hizo eso para que las bendiciones que recibió Abraham llegaran a las demás naciones. Las bendiciones vienen a través de Jesucristo para que por medio de la fe recibamos el Espíritu que Dios prometió.

15. Hermanos, les voy a dar un ejemplo de la vida diaria: imagínense que alguien hace un pacto. Una vez que ese pacto es oficial, nadie puede agregarle ni cambiarle nada, ni mucho menos ignorarlo.

16. Dios les hizo promesas a Abraham y a su «descendencia». No dice: «y a tus descendencias» refiriéndose a muchas, sino que dice: «y a tu descendencia», refiriéndose a una familia unida, la de Cristo.

Gálatas 3