8. se humilló a sí mismo y fue obediente hasta el extremo de morir en la cruz.
9. Por eso, Dios le dio el más alto honor y el nombre que está por sobre todos los nombres,
10. para que se arrodillen ante Jesús todos los que están en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra,
11. y para que todos reconozcan que Jesucristo es el Señor, dando así honra a Dios Padre.