6. Mis ovejas andan descarriadas por los montes y colinas. Han sido dispersadas por toda la faz de la tierra, y nadie las ha ido a buscar.
7. »Así que, pastores, escuchen este mensaje del SEÑOR:
8. Prometo por mí mismo, dice el Señor DIOS, que ustedes, pastores, serán castigados por haber tomado mis ovejas como un botín, por dejarlas sin pastor a merced de los animales salvajes, por ni siquiera haber tratado de ir a buscarlas, por ignorarlas y por cuidarse sólo a sí mismos.
9. Por lo tanto, pastores, escuchen este mensaje del SEÑOR.
10. Así dice el Señor DIOS: ¡Miren, estoy contra esos pastores y les demandaré mis ovejas! ¡Los echaré, no los dejaré pastorear mis ovejas nunca más! Rescataré mis ovejas de sus fauces, y los pastores ya no se alimentarán de ellas.
11. »Porque así dice el Señor DIOS: ¡Yo mismo iré a buscar a mis ovejas!
12. Las pastorearé como un pastor pastorea a su rebaño cuando anda entre sus ovejas que se han dispersado. Así las pastorearé. Las rescataré de todos los lugares donde se dispersen en el día oscuro y lleno de nubarrones.
13. Las traeré de las naciones y las reuniré de otros países para traerlas de nuevo a su tierra. Entonces las pastorearé en los montes de Israel, por los valles y todos los pueblos del país.
14. Las pastorearé en los mejores pastos y su prado se extenderá hasta los montes más altos de Israel. Descansarán en buenos pastos y se alimentarán en los mejores pastos en los montes de Israel.
15. ¡Yo mismo cuidaré a mis ovejas! Las haré reposar. El Señor DIOS lo ha dicho así.
16. Buscaré a la perdida, iré por la descarriada, cuidaré de la herida, fortaleceré a la enferma, protegeré a la gorda y fuerte. Las pastorearé con justicia.
17. »Así dice el Señor DIOS: Rebaño mío, yo impartiré justicia cuando tengan diferencias entre ustedes, entre una oveja y otra, entre los carneros y los chivos.
18. ¿No les es suficiente alimentarse de buenos pastos? ¿Por qué tienen que pisotear lo que queda? ¿Cuando bebes de aguas cristalinas, debes enturbiar el agua que queda para los demás?
19. »Mis ovejas se alimentan de los campos que pisotean y beben del estanque que enturbian con sus patas.
20. Por lo tanto, dice el Señor DIOS: Yo seré quien juzgue entre las ovejas gordas y las flacas.