13. Por eso el sabio calla, pues son tiempos malos.
14. Busquen el bien y no el mal, y vivirán. Así, el SEÑOR Dios Todopoderoso estará con ustedes, tal como ustedes mismos lo han dicho.
15. Odien el mal y amen el bien. Asegúrense de que haya justicia en los tribunales. De esa forma, quizás, el SEÑOR Dios Todopoderoso tenga compasión del resto que quedó de Israel.
16. Así dice el SEÑOR Dios Todopoderoso: «La gente llorará en todas las plazas. Todos gritarán de dolor por las calles. Los campesinos estarán de duelo y se contratarán llorones profesionales.
17. Se llorará en todos los viñedos cuando yo venga a castigarlos». Es lo que dice el SEÑOR.
18. Oigan ustedes, los que desean tanto que llegue el día del SEÑOR, ¿acaso no saben cómo será ese día del SEÑOR? Pues será de oscuridad y no de luz.
19. Será algo así como cuando alguien huye de un león y se encuentra con un oso. O como cuando uno entra a su casa, se recuesta contra la pared y lo muerde una serpiente.
20. El día del SEÑOR será de oscuridad y no de luz. Será un día negro, sin claridad alguna.
21. «¡Odio sus fiestas! ¡Me desagradan sus reuniones religiosas!
22. Aunque me hagan sacrificios que deben quemarse completamente y ofrendas de cereales, eso no me complace. Tampoco presto atención a sus ofrendas para festejar, de terneros gordos.
23. ¡Alejen de mí el ruido de sus canciones! ¡No escucharé la música de sus arpas!
24. Mejor hagan que la justicia fluya como el agua, y que sean solidarios de continuo como una fuente inagotable.
25. »Pueblo de Israel, ¿me llevaron ustedes ofrendas y sacrificios en los cuarenta años que estuvieron en el desierto?
26. En cambio, cargarán las estatuas de su rey Sicut y de su estrella Quiyún, imágenes que ustedes mismos han creado,
27. cuando yo los haga desterrar más allá de Damasco». Así dijo el SEÑOR, cuyo nombre es Dios Todopoderoso.