5. Roboán se estableció en Jerusalén y construyó estas ciudades como fortificaciones para defender a Judá.
6. Fortificó a Belén, Etam, Tecoa,
7. Betsur, Soco, Adulán,
8. Gat, Maresá, Zif,
9. Adorayin, Laquis, Azeca,
10. Zora, Ayalón y Hebrón. Esas ciudades fortificadas quedaban en Judá y en Benjamín.
11. Roboán reforzó las fortificaciones que tenían, ubicó guarniciones de soldados con comandantes militares y almacenó alimentos, aceite y vino.
12. Armó con escudos y lanzas todas las ciudades y las fortificó muy bien. Así quedó en posesión de Judá y de Benjamín.
13. Los sacerdotes y levitas de todo Israel vinieron a unirse a Roboán desde todos los lugares donde vivían.
14. Abandonaron sus campos de pastoreo y sus tierras y se refugiaron en Judá y en Jerusalén porque Jeroboán y sus hijos no les permitieron servir como sacerdotes del SEÑOR.
15. Jeroboán estableció su propio sacerdocio en los santuarios sobre las colinas para adorar a los demonios y a los becerros que él hizo.