1 Crónicas 28:1-9 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

1. David se reunió en Jerusalén con todas las autoridades de Israel, o sea, con todos los jefes de las tribus, los comandantes de las divisiones que servían al rey, los jefes de mil y cien soldados, los administradores de las propiedades, del ganado y de los hijos del rey, los funcionarios de palacio, los militares y la gente importante.

2. El rey David se puso de pie y dijo: «Escuchen, todos ustedes, hermanos y pueblo mío: Yo tenía la intención y el deseo de construir una casa para el cofre del pacto del SEÑOR. Un lugar que fuera como el trono de Dios. Así que hice todos los preparativos para su construcción,

3. pero Dios me dijo: “Tú no puedes construir una casa para alabar mi nombre porque has participado en muchas guerras y has matado a mucha gente”.

4. Sin embargo, el SEÑOR, Dios de Israel, me eligió entre mi familia para ser rey de Israel por siempre. Él eligió a la tribu de Judá como tribu gobernante; de esa tribu eligió a mi familia; y de entre mis hermanos me eligió a mí, para ser rey de Israel.

5. El SEÑOR me ha dado muchos hijos, pero de entre todos ellos ha elegido a Salomón para que ocupe el trono del SEÑOR en el reino de Israel.

6. Dios me dijo: “Tu hijo Salomón es quien va a construir mi templo y mis patios. Yo lo elegí a él para que sea como mi hijo y yo seré como su padre.

7. Siempre protegeré el reino de Salomón, si él sigue decidido a cumplir mis mandamientos como lo ha hecho hasta ahora”.

8. »Aquí delante de todo Israel, que es el pueblo del SEÑOR, y ante Dios que nos escucha, les pido a todos que cumplan los mandamientos del SEÑOR su Dios para que conserven esta buena tierra y se la puedan heredar a sus hijos y a todas las generaciones que están por venir.

9. »Salomón, hijo mío, a ti te pido que reconozcas la autoridad del Dios de tu papá. Te pido que siempre le sirvas con un corazón puro y un espíritu entusiasta, porque el SEÑOR siempre mira el corazón y conoce todos los pensamientos de los hombres. Si lo buscas, él dejará que lo encuentres. Pero si lo abandonas, él te rechazará para siempre.

1 Crónicas 28