1 Corintios 10:7-21 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

7. No adoremos ídolos, como hicieron algunos de ellos. Así está escrito: «Todos se reunieron a comer y a beber y luego empezaron a parrandear».

8. No cometamos inmoralidades sexuales, como hicieron muchos de ellos. En un solo día murieron veintitrés mil de ellos por culpa de esa inmoralidad.

9. No pongamos a prueba a Cristo como lo hicieron algunos de ellos, quienes murieron víctimas de las serpientes.

10. No nos quejemos, como se quejaron algunos y por eso el ángel de la muerte los mató.

11. Todo eso sucedió para servirnos de ejemplo, y fue escrito como advertencia para nosotros que vivimos en los últimos tiempos.

12. Así que, el que se sienta muy seguro y firme, cuídese de no caer.

13. Ustedes sólo han tenido las mismas tentaciones que todos los demás. Pero Dios es fiel y no va a dejar que sean tentados más allá de lo que puedan soportar. Así que sepan que cuando sean tentados, van a poder soportar, porque Dios les dará una salida.

14. Por eso, estimados hermanos, ni se les ocurra adorar ídolos.

15. Les hablo como a gente con la que se puede razonar, juzguen ustedes mismos lo que les digo.

16. Ciertamente, beber de la copa de bendición por la que damos gracias, ¿no es compartir la sangre de Cristo? Y comer del pan que partimos, ¿no es compartir el cuerpo de Cristo?

17. Existe un solo pan y nosotros somos muchos. Eso significa que cuando todos comemos y compartimos ese pan, formamos un solo cuerpo.

18. Fíjense en lo que ocurre cuando el pueblo de Israel ofrece sacrificios. Cuando comen la carne sacrificada en el altar, ¿acaso no la están compartiendo con Dios?

19. No estoy diciendo que los sacrificios a los ídolos tienen algún valor ni que los ídolos mismos lo tengan.

20. No, porque esos sacrificios se ofrecen a los demonios, no a Dios, y no quiero que ustedes compartan con los demonios.

21. Ustedes no pueden beber de la copa del Señor y, a la vez, de la copa de los demonios. No pueden compartir de la mesa del Señor y, a la vez, de la mesa de los demonios.

1 Corintios 10