29. Jesús, entonces, le dijo:— Por eso que has dicho puedes irte, pues el demonio ya ha salido de tu hija.
30. La mujer regresó a su casa y encontró a su hija acostada en la cama y libre del demonio.
31. Jesús salió de nuevo de la región de Tiro y, pasando por Sidón*, se dirigió al lago de Galilea* a través del territorio de la Decápolis.