20. Ante el Dios de la verdad y de la alianza,avergüéncense de apoyar los codos en la mesa,
21. de dar o recibir con aire despectivo,de no devolver el saludo,
22. de fijar la mirada en una prostituta,de volver la espalda a un pariente,
23. de quitar a uno sus pertenencias o regalos,de poner los ojos en la esposa de otro,
24. de excesiva familiaridad con las criadas—¡cuidado con acercarse a su cama!—,
25. de afrentar a los amigos con injurias—¡no sean de los que echan en cara lo que dan!—,
26. de ir contando rumores y revelando secretos.
27. Esta sí que es la verdadera vergüenza,la que les granjeará el aprecio ante cualquiera.