1. En cierta ocasión en que el rey Antíoco estaba recorriendo las regiones de la meseta, oyó decir que en Persia había una ciudad llamada Elimaida, famosa por sus riquezas de plata y oro.
2. Tenía un templo sumamente rico, en donde había armaduras de oro, corazas y armas que había dejado allí Alejandro, hijo de Filipo y rey de Macedonia, el primero de los reyes griegos.
3. Antíoco se dirigió a esa ciudad con el propósito de apoderarse de ella; pero no lo pudo lograr, porque sus habitantes se enteraron de sus planes
4. y le hicieron frente, luchando de tal modo que se vio forzado a huir, a irse de allí y volver a Babilonia lleno de amargura.
5. Mientras aún estaba en Persia, le llegó la noticia de la derrota sufrida por los ejércitos enviados contra Judea,