9. Apenas hubo muerto Alejandro, se ciñeron todos la corona, y sus descendientes después de ellos. Así transcurrieron muchos años, durante los cuales colmaron de desastres el país.
10. De entre aquellos generales surgió un hijo del rey Antíoco, un vástago perverso llamado Antíoco Epífanes*, que había estado en Roma como rehén*. Empezó a reinar en el año ciento treinta y siete del imperio griego.
11. Por el mismo tiempo apareció un grupo de israelitas apóstatas, que convencieron a muchos, diciendo: “Hagamos una alianza con las naciones de nuestro entorno, porque desde que nos apartamos de ellas nos han sobrevenido muchas calamidades”.
12. La propuesta fue bien acogida,
13. de modo que algunos del pueblo se animaron a dirigirse al rey, que les autorizó a observar las costumbres paganas.