6. Entonces dije: ¡Ah, Señor Dios! He aquí, no sé hablar, porque soy joven.
7. Pero el Señor me dijo: No digas: "Soy joven", porque adondequiera que te envíe, irás, y todo lo que te mande, dirás.
8. No tengas temor ante ellos, porque contigo estoy para librarte--declara el Señor.
9. Entonces extendió el Señor su mano y tocó mi boca. Y el Señor me dijo: He aquí, he puesto mis palabras en tu boca.
10. Mira, hoy te he dado autoridad sobre las naciones y sobre los reinos, para arrancar y para derribar, para destruir y para derrocar, para edificar y para plantar.
11. Vino entonces a mí la palabra del Señor, diciendo: ¿Qué ves tú, Jeremías? Y yo respondí: Veo una vara de almendro.
12. Y me dijo el Señor: Bien has visto, porque yo velo sobre mi palabra para cumplirla.
13. Por segunda vez vino a mí la palabra del Señor, diciendo: ¿Qué ves tú? Y respondí: Veo una olla hirviendo que se vuelca desde el norte.
14. Y me dijo el Señor: Desde el norte irrumpirá el mal sobre todos los habitantes de esta tierra.