10. En el momento de salir del agua, Jesús vio que el cielo se abría y que el Espíritu bajaba sobre él como una paloma.
11. Y se oyó una voz del cielo, que decía: «Tú eres mi Hijo amado, a quien he elegido.»
12. Después de esto, el Espíritu llevó a Jesús al desierto.
13. Allí estuvo cuarenta días, viviendo entre las fieras y siendo puesto a prueba por Satanás; y los ángeles le servían.