3. «Señor, han matado a tus profetas y han destruido tus altares; sólo yo he quedado con vida, y a mí también me quieren matar.»
4. Pero Dios le contestó: «He apartado para mí siete mil hombres que no se han arrodillado ante el dios Baal.»
5. Pues de la misma manera, ha quedado ahora un pequeño resto, que Dios, en su bondad, ha escogido.
6. Y si es por la bondad de Dios, ya no es por los hechos; porque si así fuera, la bondad de Dios ya no sería bondad.
7. ¿Entonces qué? Los israelitas no consiguieron lo que buscaban, pero los que Dios escogió sí lo consiguieron. Los otros fueron endurecidos,