1. »Los sacrificios por la culpa son una cosa santísima. Éstas son las instrucciones en cuanto a ellos:
2. El animal ofrecido por la culpa deberá ser degollado en el lugar donde se matan los animales que se ofrecen para ser quemados, y con su sangre se deberá rociar los costados del altar.
3. Se deberá ofrecer toda la grasa del animal: la que hay en la cola y la que cubre las vísceras,
4. los dos riñones, la grasa que los cubre y la que está sobre los lomos, así como la parte grasosa que está sobre el hígado, la cual se deberá quitar junto con los riñones.
5. Luego el sacerdote quemará esto sobre el altar, como ofrenda quemada en honor del Señor. Es un sacrificio por la culpa,