18. »Si a pesar de esto no me obedecen, los volveré a castigar siete veces por sus pecados.
19. Haré pedazos su necio orgullo; haré que el cielo les niegue su lluvia y la tierra sus frutos.
20. En vano gastarán sus fuerzas, porque la tierra no les producirá nada, ni los árboles del campo les darán frutos.