1. El Señor dice:«Los que no me habían pedido nadafueron los que acudieron a mí;los que no me habían buscadofueron los que me encontraron.A un pueblo que no me había invocadofue al que le dije: “Aquí estoy.”
2. Todo el día extendí mis manospara atraer a un pueblo rebeldeque iba por caminos perversossiguiendo sus propios caprichos;
3. un pueblo que en mi propia carame ofendía continuamente;que ofrecía sacrificios a los dioses en los jardinesy quemaba incienso en altares de ladrillo;
4. que se sentaba entre los sepulcrosy pasaba las noches en sitios escondidos;que comía carne de cerdoy llenaba sus ollas de caldos impuros.
5. Dicen: “Quédate ahí, no me toques;soy demasiado sagrado para que me toques.”Esa gente es como fuego que arde todo el día;me molestan como el humo en las narices.
6. Pero todo esto está escrito delante de mí,y no voy a quedarme cruzado de brazos;voy a darles su merecido,
7. tanto por los crímenes de elloscomo por los de sus padres.Ellos quemaban incienso sobre los montesy me ofendían en las colinas.Haré primero la cuentay les daré su merecido.»El Señor lo ha dicho.