17. Lía tenía unos ojos muy tiernos, pero Raquel era hermosa de pies a cabeza.
18. Como Jacob se había enamorado de Raquel, contestó:—Por Raquel, tu hija menor, trabajaré siete años para ti.
19. Entonces Labán contestó:—Es mejor dártela a ti que dársela a un extraño. Quédate conmigo.