4. Pues todo lo que Dios ha creado es bueno; y nada debe ser rechazado si lo aceptamos dando gracias a Dios,
5. porque la palabra de Dios y la oración lo hacen puro.
6. Enseña estas cosas a los hermanos, y serás un buen servidor de Cristo Jesús, un servidor alimentado con las palabras de la fe y de la buena enseñanza que has seguido.
7. Pero no hagas caso de cuentos mundanos y tontos. Ejercítate en la piedad;
8. pues aunque el ejercicio físico sirve para algo, la piedad es útil para todo, porque tiene promesas de vida para el presente y para el futuro.
9. Esto es muy cierto, y todos deben creerlo.
10. Por eso mismo trabajamos y luchamos, porque hemos puesto nuestra esperanza en el Dios viviente, que es el Salvador de todos, especialmente de los que creen.
11. Estas cosas tienes que mandar y enseñar.
12. Evita que te desprecien por ser joven; más bien debes ser un ejemplo para los creyentes en tu modo de hablar y de portarte, y en amor, fe y pureza de vida.
13. Mientras llego, dedícate a leer en público las Escrituras, a animar a los hermanos y a instruirlos.