64. En aquel mismo momento, Zacarías recobró el habla y comenzó a alabar a Dios.
65. Todos los vecinos estaban asombrados, y en toda la región montañosa de Judea se contaba lo sucedido.
66. Cuantos lo oían se preguntaban a sí mismos: “¿Qué llegará a ser este niño?” Porque ciertamente el Señor mostraba su poder en favor de él.
67. Zacarías, el padre del niño, lleno del Espíritu Santo y hablando en profecía, dijo:
68. “¡Bendito sea el Señor, Dios de Israel,porque ha venido a rescatar a su pueblo!
69. Nos ha enviado un poderoso salvador,un descendiente de David, su siervo.